Elsa Pataky deslumbró a todos los Londinenses presentándose así de guapa en la premiere de Los Vengadores, película donde su marido, el también guapísimo Chris Hemsworth, hace del indomable Thor, uno de los superhéroes con los que nos va a sorprender Marvel en esta pedazo de peli.
Mirad lo mona que está Elsa. Y lo feliz que parece. Obvio que como para no estarlo… Tiene éxito. Es famosa. Es una mujer super sexy y muy deseada. Tiene un marido que está tremendo y espera un hijo con él. Parece que la vida le sonríe, y cuando la vemos todos pensamos en lo jovencita e inocente que parecía en Al Salir de Clase.
Aquí la tenemos, años más tarde, con una tripota de embarazada enorme y redondita. Con un escote que ha crecido en partes proporcionales a su estado de buena esperanza, para deleite de su Chris y de todos sus fans y admiradores. Mirad qué imagen tan tierna de futuros papis que se sorprenden por las pataditas que da su hijo. Son puro amor.
Mirad qué maja ella, que en honor a su pasado y a su mítico posado, hizo “un pataky” en toda regla. Se puso de espaldas, miró hacia detrás y ahí estaba, la pose que tantas famosas han querido imitar pero que sólo le queda así de deslumbrante a una estrella como ella (por lo de que deslumbra, no hablo en el ámbito profesional, que ese es otro tema…).
Obvio que no me quedaré contenta si no digo que Elsa ha dado un pelotazo encontrando a un hombre como Chris, casándose con él y consiguiendo de esta manera ser una pareja guapa y molona (cosa que con Audrien Brody no terminaba de cuajar, más que nada por lo de guapa). ¿Que a raíz de su relación le saldrán más trabajos? No nos cabe la menor duda. ¿Que será porque es una actriz buenísima? Eso ya lo pongo más en jaque… Es guapa y simpática. Punto pelota. Como su tripota.
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